Acusan a Windows 10 de ser herramienta una espía Las expectativas de Microsoft con el lanzamiento del SO Windows 10 fueron en su momento bastante altas, pero tal parece que hasta la fecha les ha costado llegar a la cuota de mercado que desde un principio tenían fijada.
Son muchos los comentarios negativos que se han tornado sobre este sistema operativo y es que su seguridad y privacidad hasta ahora no ha sido las más efectivas. Desde que llegó oficialmente al mercado se han cernido posibilidades que acusan a Windows 10 de ser una herramienta espía, ya que es abiertamente conocido que este software recopila bastantes datos inclusive contraseñas de sus usuarios y los mismos son enviados a servidores de Microsoft. Lo que la compañía de Bill Gates hace con estos datos para todo es desconocido, pero siempre han mantenido la teoría que es para brindar una especie de mejor calidad basada en las necesidades que tenga cada uno de sus clientes.
Sin embargo tras varios ataques graves debido a vulnerabilidades de puertas traseras, la compañía ha realizado varias mejoras especialmente con la llegada de la Creators Update.
Microsoft ha reducido, tal como pedían los usuarios, el número de datos que enviaba a sus servidores. Además, también ha mejorado notablemente las opciones de privacidad, explicando mucho mejor qué hace cada una de ellas y permitiendo fácilmente desactivar por completo el envío de dichos datos.
Con estas opciones de privacidad incluidas en el asistente de instalación, se pueden visualizar la cantidad y tipo de datos que son sincronizados con Windows y también se pueden eliminar todos aquellos datos que no queremos que sigan allí.
Todos estos cambios y aperturas basadas en las opiniones de los clientes, al parecer le han traído a la compañía de software, una renovada confianza con sus clientes reduciéndose así las críticas y las acusaciones sobre el espionaje de Windows 10.